El compositor Giacomo Puccini tuvo fama de presumido y seductor. Estaba considerado como uno de los hombres más elegantes de su época. Se cambia de ropa cinco o seis veces al día y una minúscula manchita en el traje o un color que no entonase le enfadaban. Se trasladó a Pisa a pie para asistir al estreno local de Aida, de Verdi, quizás por eso se convertía después en el primer conductor del distrito de Lucca con el número 118 del Touring Club Italiano de permiso de conducir, sufriendo un accidente en 1903 que le convirtió en el primer compositor infractor de las normas de circulación en la historia. Fue amante también de la navegación, tuvo varias embarcaciones, una parte anclada en su pequeño puerto privado, y otra en Viareggio.
Durante los años de enemistad entre Toscanini y Puccini se produjo la siguiente anécdota: Con la llegada de la Navidad, es costumbre regalar a amigos y familiares un dulce típico llamado panetone y Puccini dio la orden a su servicio de que enviaran panetones a las direcciones de costumbre, entre las que se hallaba la de su enemigo.Al darse cuenta del error -el panetone ya había sido enviado- mandó un telegrama a Toscanini con el texto:
- Panetone enviado por error.
La respuesta de Toscanini fue:
- Panetone comido por error.
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